QUINTA REAL

En la Ciudad de México no existe un Quinta Real porque no queremos que sea un hotel más, dice José Antonio Alonso Espinosa.

El presidente del Consejo de Administración de estos hoteles de lujo, de los cuales hay ocho en México y uno en Guatemala, explica que para abrir una nueva propiedad se requiere conjuntar varios factores, ya que cada una es especial.

"Nuestro servicio es excelente. Además, nosotros no vendemos un hotel, vendemos México: la amabilidad de su gente, sus artistas, su arquitectura", comenta.

Los viajeros que se hospedan en Quinta Real son gente que busca exclusividad. Alonso Espinosa lo sabe, por eso siempre han buscado que sus hoteles tengan entre 100 y 200 habitaciones como máximo, para mantener el alto nivel de servicio personalizado que los caracteriza.

Cuenta que les ofrecieron abrir un hotel en el Hipódromo de las Américas, pero lo rechazaron porque no les interesa manejar una propiedad con clientela masiva. Aunque no lo descarta, siempre y cuando mantengan su estilo.

Declina hablar de cifras respecto a sus inversiones para 2003 y el futuro, "son montos muy importantes", externa solamente. Pero precisa que los costos promedio de sus hoteles son de 200 mil dólares por habitación.

Por lo pronto, este año cerrarán con cuatro nuevos Quinta Real: Saltillo, Torreón, Chihuahua e Ixtapa, que se sumarán a la lista que ya confirman Acapulco, Aguascalientes, Guadalajara, Huatulco, Monterrey, Zacatecas, San Miguel de Allende y Puerto Vallarta, inaugurado el año pasado, el cual, presume abiertamente el empresario, es el mejor de la plaza.

Como orgulloso también está de su hotel el Huatulco, Oaxaca, destino al que le augura un gran futuro.

Dos factores son fundamentales para ello: mientras la mayoría de los hoteles del lugar registran baja ocupación, ellos mantienen un promedio arriba de 60% y tarifas 100% más altas que su más cercano competidor.

Además, en Huatulco pusieron en marcha el proyecto "Residencial Quinta Real", un sistema de tiempo fraccionado que extenderán a sus demás hoteles de playa. Hasta el momento, 90% de sus compradores son estadounidenses.

No obstante, la gran deuda con su clientela sigue siendo la capital del país, donde están ausentes.

Alonso Espinosa lo sabe, por eso ya están estudiando dos propiedades y adelanta que, a más tardar, para el 2005 habrá un Quinta Real en la Ciudad de México, si las cosas marchan como hasta ahora.

www.quintareal.com

Revista Mundo Ejecutivo. Edición anual “Hecho en México”