LA COALICIÓN “PUENTE DE MONTERREY”: Cómo lograr resultados para los pobres y el medio ambiente

La Conferencia Internacional sobre Financiamiento para el Desarrollo celebrada en marzo de 2002 en Monterrey, se ha convertido en un símbolo del compromiso contraído por el mundo industrializado de redoblar sus esfuerzos para reducir la pobreza. Sus resultados se conocen como el Consenso de Monterrey. Hoy en día, el desafío para las autoridades mundiales es ¿cómo pasar de este Consenso a la obtención de resultados?

La Coalición “Puente de Monterrey” se formó el 23 de julio del 2002 para asegurarse de que la lucha contra el hambre y la pobreza ocupara un lugar central en el programa de trabajo de la Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible celebrada en Johannesburgo. Ahí envió un enérgico mensaje a los delegados de que era indispensable integrar estrategias para mejorar la producción de alimentos y la biodiversidad con el fin de lograr un desarrollo sostenible y cumplir con las Metas de Desarrollo del Milenio.

El Plan de Implementación adoptado en la Cumbre de Johannesburgo no da orientación ni metas específicas, por lo que sin un plan de acción claro, se demorará el progreso hacia el logro de las Metas de Desarrollo del Milenio y dejarán de cumplirse los compromisos contraídos en Monterrey. Asimismo, las sesiones celebradas en noviembre sobre la estrategia de la Coalición “Puente de Monterrey” congregaron a un grupo de interesados para comenzar a diseñar un plan de medidas enfocadas a lograr resultados en la lucha contra el hambre y la mejora de los medios de vida de la población rural dentro del marco de una rectoría ambiental productiva y de las Metas de Desarrollo del Milenio.

La Coalición “Puente de Monterrey” trabajará con otras iniciativas paralelas, como el Grupo Especial de las Naciones Unidas sobre el Hambre, y otros pertinentes, para ofrecer un vehículo de comunicaciones y de defensa de intereses para su trabajo y observar el progreso hacia el logro de metas comunes de importancia clave.

Recientemente, la Coalición determinó que sería importante organizar una conferencia de alto nivel sobre política en México los días 2 y 3 de junio de 2003, programada estratégicamente para hacer un aporte sustantivo a dos celebraciones clave en materia de política: la Conferencia del Grupo de los 8 en Evian a fines de junio de 2003 y la Reunión Ministerial de la Organización Mundial de Comercio en Cancún en septiembre de 2003.

La reunión se celebrará en México por el cada vez mayor reconocimiento del liderazgo de México en cuestiones de política internacional, así como por el éxito reconocido de la Conferencia Internacional sobre Financiamiento para el Desarrollo celebrada en Monterrey, y el sólido interés del gobierno de México en ser el anfitrión.  La conferencia se celebrará junto con la Reunión Anual del Consejo Internacional sobre Políticas de Agricultura, Alimentación y Comercio, y el 2 de junio habrá un programa de trabajo compartido, donde se agrupará a dirigentes mundiales de las esferas empresarial, gubernamental, científica y económica, ONGs y los medios de comunicación para discutir las recomendaciones iniciales y un plan de acción para aliviar la pobreza y el hambre mediante la integración de las estrategias de protección de la agricultura sostenible y la biodiversidad.

La idea general es evaluar la situación actual como resultado de los compromisos contraídos en la Conferencia de Monterrey, el lanzamiento de la ronda de negociaciones comerciales de Doha y la Cumbre de Johannesburgo.  La conferencia abordará las siguientes cuestiones: ¿Qué se ha hecho realmente como resultado del proceso iniciado por las Naciones Unidas y la Organización Mundial del Comercio?, ¿qué compromisos se han contraído?, ¿cuáles son los planes de implementación y los mecanismos financieros para alcanzar las Metas de Desarrollo del Milenio relacionadas con el hambre, la pobreza y la biodiversidad en el año 2015?, etc.

Para esto, se debatirán temas específicos como: pobreza, agricultura y biodiversidad: cómo hacer las conexiones (contexto): implementación del desarrollo sostenible: el nexo crítico entre la producción de alimentos y la ordenación de los recursos naturales; política en materia de comercio: la OMC y la ronda de negociaciones comerciales de Doha; inversión en investigación y tecnología agrícolas: ¿cuáles son las necesidades y cuáles son los métodos óptimos?, financiamiento: inversiones de los sectores público y privado.

Los organizadores esperan tener resultados en cuanto a establecer un acuerdo preliminar sobre el programa de acción y las funciones y expectativas de los sectores e instituciones representados en la conferencia, así como un comunicado con propuestas de acción específicas para alcanzar las Metas de Desarrollo del Milenio en lo que respecta al hambre, pobreza y biodiversidad, y un acuerdo para trabajar juntos dentro del marco de la Coalición “Puente de Monterrey” para alcanzar las metas acordadas.

Para ampliar el poder de convocatoria de esta reunión, además de tener al Presidente Fox como anfitrión, la Coalición “Puente de Monterrey” ha buscado la participación de otras personalidades, como el ex presidente James Carter (Embajador de la Fundación Future Harvest); la Sra. Clare Short, ministra de Desarrollo de Ultramar, Reino Unido; el Profesor Jeffrey Sachs, Instituto de Tierra, Universidad de Columbia; el Dr. Gordon Conway, presidente de la Fundación Rockefeller, así como representantes de alto rango de las Naciones Unidas y la Organización Mundial del Comercio.

¿POR QUÉ DEBEMOS ESTAR PREOCUPADOS?

-Tres de cada cuatro personas del mundo en desarrollo, es decir, un total de 900 millones, viven en las zonas rurales y dependen directamente de la agricultura para su sustento.

-La demanda de alimentos se duplicará en los próximos 30 a 40 años y el 80% provendrá del mundo en desarrollo.

-La biodiversidad se pierde a una velocidad alarmante. Por ejemplo, 25 lugares alrededor del mundo ocupan solamente 1.4% de la superficie total y contienen más de 60% de la flora y la fauna del Planeta.

-La agricultura y el medio ambiente están estrechamente vinculados y las actividades agrícolas afectan a la mayoría de los recursos naturales del mundo, como la tierra, el agua dulce y la biodiversidad.

En estas condiciones, el panorama del futuro es alarmante. Por eso es esencial agregar metas y puntos de acción al Plan de Implementación de la Cumbre de Johannesburgo y a las Metas de Desarrollo del Milenio y ofrecer un marco para las empresas (la clave de la verdadera sostenibilidad), los gobiernos, las ONG y otros interesados con el fin de lograr resultados.

CONTACTOS: Jacqueline Avalos                           y/o  Nelly Martínez            Ó CB Comunicación Ó Tel. 5525 5454